La Enfermería es una ciencia sanitaria que abarca la atención al ser humano en su globalidad y en todas las etapas de la vida. Por su concepción, este tipo de ciencias necesitan especializarse por varias razones: que los profesionales trabajen en un mismo ámbito, enfocando su ejercicio, convirtiéndose en expertos de la materia; que esos especialistas investiguen, profundicen y desarrollen sus campos produciendo una evolución de la ciencia enfermera desde múltiples focos.
En la mayoría de países desarrollados las especialidades enfermeras están operativas e insertadas en sus sistemas sanitarios, elevando la calidad de la atención sanitaria notablemente.
En España, sin embargo, la titulación de especialista enfermero no te asegura un puesto de trabajo, ni siquiera trabajar en el ámbito de tu especialidad. A pesar de tener 4 años de formación universitaria, un año mínimo de estudio intenso para el examen y dos años de formación como residente, total 7 años mínimo. Pero el futuro es bastante alentador para las especialidades enfermeras por lo que es fundamental una buena formación por lo que los cursos de enfermería se hacen imprescindibles para conseguir esos créditos que te garanticen una adecuada especialización.
Los aspectos formativos son esenciales para el desarrollo de cualquier disciplina. La ciencia enfermera ha vivido cambios profundos y positivos en su historia más reciente, que han culminado con su conversión académica en título de grado y la posibilidad de acceder a estudios superiores de segundo y tercer ciclos (másteres y doctorados).
Analizamos día a día la situación actual de la formación superior en Enfermería reflexionando sobre los antecedentes. El nivel académico y formativo de las enfermeras se ha mostrado como un elemento clave en aspectos básicos para los servicios sanitarios, como son la mejora de la seguridad del paciente y los resultados en salud (disminución de la mortalidad hospitalaria, menos eventos no deseados como errores de medicación, caídas, úlceras por presión…), y una mejora global de la calidad del cuidado.
Además, ello está repercutiendo en el protagonismo social que las enfermeras están adquiriendo. Por ello, el acceso al desarrollo académico superior de las enfermeras a través de másteres (profesionalizantes o investigadores) o programas de doctorado, además de contribuir a desarrollar la disciplina, mejora el cuidado y permite la asunción de nuevas responsabilidades y roles avanzados, que son no solo de mayor calidad, sino también más eficientes para el sistema, que debe fomentar y facilitar la formación de sus enfermeras.
Como ya hemos visto, la especialización en el ámbito sanitario es, no solo el futuro, sino también el presente de este sector. Es por esto que cada día más sanitarios se deciden a ampliar sus conocimientos y actualizar sus técnicas a través de opciones formativas especializadas.
En este sentido, los apoyos más interesantes vienen dados por cursar másters universitarios, cursos universitarios de especialización y demás opciones formativas, como pueden ser los cursos de reciclaje y actualización profesional. Sea como sea, lo interesante es mejorar las aptitudes personales en aquellas materias que son verdaderamente relevantes y que puedan permitir el cumplimiento de cualquier objetivo profesional.
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